sábado, 1 de mayo de 2010

Un Bicentenario sin Independencia

Mujer es...

OPINION
Por Samara Del Toro

Mientras por un lado se celebra con entusiasmo el año del bicentenario de la Independencia de México, en otras partes de nuestro país el cacicazgo y la opresión son una realidad donde la búsqueda de una democracia y de un gobierno que responda a su pueblo es algo que se paga con la vida.

Así lo confirma el ataque hacia la caravana de activistas sociales y periodistas que acudían a dar apoyo a una comunidad indígena de Oaxaca, el grupo fue emboscado y balaceado, en el acto terrorista murieron la mexicana Beatriz Alberta Cariño Jaramillo y Jyri Antero Jaakkola de origen finlandés.
Esto sucedió el pasado 27 de abril, cuando la comitiva se dirigía al Municipio autónomo de San Juan Copala, habitado por indígenas Triquis, en el grupo se encontraban observadores civiles, periodistas, defensores de los derechos humanos así como docentes, todos ellos acudían con el fin de ayudar al naciente gobierno local así como documentar la difícil situación que enfrenta la comunidad que permanece sitiada por paramilitares y sin acceso a servicios como energía eléctrica, escuelas ni atención médica en un clima de represión donde la ley que impera es la de las armas.
La causa del problema que mantiene sumido a San Juan Copala en la violencia es complejo, y surge por las pugnas de poder entre grupos internos, –algunos respaldados por el gobierno estatal encabezado por Ulises Ruiz Ortiz-.
Y aunque esto nos parezca una realidad ajena, ya que no lo escuchamos en los titulares de los principales noticieros del país, ni se le da el seguimiento que han merecido recientemente casos como el de la pequeña Paulette, esto sucede en las entrañas de la sierra de Oaxaca donde se ha impuesto un cerco mediático por el gobierno oaxaqueño que ha logrado hacer invisible el conflicto armado que se vive en esta zona.

En la búsqueda de la Autonomía
La proclamación de San Juan Copala como un estado independiente en 2007, fue la respuesta del pueblo para franquear la barrera de la discriminación y olvido en el que han permanecido y que al igual que la mayor parte de las comunidades indígenas los mantiene sumidos en la pobreza extrema, por lo que luchan por el poder de elegir un gobierno que responda a sus necesidades y respete sus tradiciones y riqueza cultural.
Sin embargo esto a sido motivo de discordia entre quienes pretenden el control político de este municipio como son el Movimiento Unificador de Lucha Triqui –MULT-, el Movimiento Unificador de Lucha Triqui Independiente –MULTI- y la Unión de Bienestar Social de la Región Triqui -UBISORT- a quien se le atribuyen el mas reciente atentado terrorista y se le vincula con el gobierno estatal.
No hay explicación sencilla para la situación política que se vive en San Juan Copala ya que existen muchos interés de por medio, sin embargo, la realidad es una sola, no hay garantías para la población, se esta torturando, asesinando y atemorizando a toda una comunidad que permanece en sitio de guerra, donde no se respeta ni a la niñez ya que incluso un albergue infantil fue blanco de uno de estos ataques ocasionando la muerte del pequeño Elías Fernández e hiriendo a varios más, y no hablamos de Afganistán o Irak, es ¡aquí en México!.

Pero aun cuando el panorama es inquietante, la solidaridad civil es una esperanza, y en un mundo cada vez mas globalizado unir nuestras voces de protesta es una herramienta, por ello la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos en su la pagina de Internet http://www.redtdt.org.mx en el enlace de Acciones Urgentes invita a la población a firmar una carta donde se pide en primer termino al Presidente de la Republica Felipe Calderón Hinojosa, que se garantice la seguridad de los observadores de los derechos humanos, y exige al gobierno estatal que asuma su responsabilidad de proteger a la población.
Ante esta llamada de apoyo, esperemos que sean muchas las personas que se sumen a esta acción y juntos como sociedad actuemos por un México más justo para todos y todas.

samaradetoro@hotmail.com