sábado, 8 de enero de 2022

Este proyecto busca promover el respeto por el medio ambiente además de integrar a los habitantes indígenas de la región.


Cd. Valles, S.L.P.- El Eco Hotel Sharet Huasteca Potosina es uno más de los sueños que ha logrado cristalizar su propietaria Etna de la Teja Arvizú, quien ha  dado forma a este proyecto desde sus cimientos, hasta el día de hoy que ofrece sus servicios contando con cabañas ecológicas totalmente funcionales, construidas de forma sustentable, bajo los usos y costumbres de la zona indígena donde se ubica, con materiales típicos y con un mínimo impacto ambiental.
A 15 minutos de Cd. Valles, San Luis Potosí, ciudad conocida como la puerta grande de la Huasteca Potosina, se ubica el Eco Hotel Sharet, dentro de la comunidad indígena Tenek en el ejido La Toconala, esta huasteca se ha convertido en un importante atractivo turístico por la exuberante belleza natural de sus parajes naturales, cascadas, ríos, grutas, y un sinfín de atractivos para las personas nacionales y extranjeras.


Inicio de un sueño.
Etna de la Teja Arvizú, originaria de Cd Valles, está acostumbrada a soñar en grande y trabajar por esos sueños sin


descanso, el primero de ellos fue la promotora turística SHARET y que surgió por el deseo de que más personas conocieran y se enamoraran de la diversidad de parajes con que cuenta la huasteca potosina.
Ella y su familia eran asiduos visitantes de los lugares turísticos de esta región, y con frecuencia invitaban amistades a estos recorridos que en ese entonces no tenían la gran difusión de la que gozan hoy en día gracias a las redes sociales.
Fue así como una actividad realizada por amor y hospitalidad, se convirtió en SHARET operadora turística, la cual tiene más de una década de dar servicio siendo un referente en cuanto a turismo de aventura promoviendo un turismo que preserva y respeta la naturaleza.
De acuerdo a su propietaria quien es Licenciada en Administración de Empresas y Estrategias de Negocios el auge que ha tenido el eco turismo de aventura se debe a que los destinos de sol y playa se está agotado a causa del excesivo y muchas veces descontrolado desarrollo de infraestructura física que ha degradado el entorno natural y cultural de muchos sitios antes atractivos, así como  la contaminación de las playas y el temor de contraer cáncer de piel.
Destacó que estos factores han generado un mayor interés por conocer de primera mano paisajes, fauna y culturas exóticas impulsando a la gente a realizar viajes de conocimiento y exploración más que sedentarias visitas a playas como se acostumbraba, afirma De la Teja Arvizú.
 "Es por ello que iniciamos en primera instancia a SHARET operadora turística brindando tours eco turísticos y de aventura a los clientes" indica nuestra entrevistada quien ha logrado consolidar su empresa como una de las mejores opciones por el profesionalismo y la entrega que ponen en cada uno de los recorridos que realizan haciendo de los clientes amigos, que se sienten identificados con esta empresa familiar

Turismo sustentable
"Nos dimos cuenta que era necesario no sólo llevarlos a conocer los lugares, si no que estuvieran en contacto con la naturaleza, por tal motivo nació la idea de hospedarlos en un lugar natural, de allí surge este ECO HOTEL impulsando así  la conservación, restauración y manejo sostenible del ambiente" afirma Etna de la Teja.
“Las cabañas del Eco Hotel SHARET están construidas de manera artesanal con materiales típicos de la región como otate y palma; las paredes están hechas de enjarre que es una mezcla de zacate y tierra amarilla en base a costumbres y tradiciones de nuestra Etnia Tenek, ayudando así a mantener fresca cada una de las habitaciones” explica De la Teja Arvizú.

Uno de los objetivos con los que se ha trabajado en este proyecto es la participación de la comunidad indígena practicando siempre un turismo responsable.
 Sin embargo no ha sido fácil, entre los retos que se han enfrentado para poner en marcha este Eco hotel, nos narra su propietaria, estuvo el que la comunidad indígena del ejido Toconala lo aceptara, asimismo el iniciar la construcción de acuerdo a los usos y costumbres de los pobladores.
“Tardamos un año y medio en la construcción de las cabañas porque se respetó la tradición de los trabajadores quienes son indígenas tenek, ellos cortan el otate, la palma y los horcones en luna tierna, porque según sus creencias es cuando la madre naturaleza les permite el corte y hace que la madera no se apolille y dure más, se utilizó madera que ellos venden y preparan como vigas y también madera de rehúso ya que la finalidad es reducir el impacto ambiental" indica Etna mostrando la Cabañas construidas con estos materiales los cuales hacen que sean muy frescas, cualidad necesaria para el clima tropical de la región.
Agrega que el proceso de capacitación para la gente de la comunidad también fue lento, sin embargo fue necesario ya que uno de los objetivos era beneficiar también a los habitantes de la comunidad local.
En la propiedad se cuenta con hamacas, se puede hacer senderismo, sus árboles y jardines inspiran una tranquilidad que difícilmente se encuentra en las grandes ciudades, haciendo de este sitio un lugar perfecto para el descanso después de un día de aventuras practicando el rafting, rapel o las visitas a uno de los muchos ríos o cascadas que abundan en la zona.
Afrontando retos
Al respecto de la complejidad que conlleva realizar este hotel buscando el mayor respeto posible a la naturaleza, Etna reconoce el esfuerzo que ha llevado "sabía de antemano que todo el proyecto en sí, sería un reto, por ser único e innovador en la región, tan sólo la serie de permisos que hay que solicitar para poder construir con material propio de la región, los accesos a la comunidad, el terreno".
Y agrega que se sigue trabajando en la integración con los pobladores haciéndolos partícipes de las actividades del eco hotel, el cual sigue en crecimiento ya que se está por iniciar la construcción de una alberca ecológica donde la limpieza del agua se realiza de forma natural a base de ciertos tipos de flora, y sistemas de filtración ya que es una empresa comprometida con la conservación del medio ambiente siempre buscando alternativas para el ahorro de energía eléctrica, agua y así disminuir la contaminación que afecta el planeta.
Respecto al futuro de este innovador hotel nos dice “lo visualizo como una empresa sustentable que logra un equilibrio entre el medio ambiente, los huéspedes y la gente de la comunidad”.
Al cuestionarle si la edad representa un reto para emprender, responde con alegría "claro que no, los sueños no tienen edad y menos cuando te rodean personas que te aman, te quieren e impulsan a realizarlos, como la familia, amigos, compañeros de trabajo y sobre todo de Dios."
Asimismo reconoce que su impulso es la vida misma, "todos los días cuando despierto doy gracias por un día más y me pregunto ¿qué haremos ahora cerebro? Y yo misma me contesto; lo que hacemos todos los días, ser una buena hija, hermana, tía, amiga, jefa, en fin, una buena persona, ayudando a los que necesiten y apoyando las buenas causas. Hay un dicho que dice “vive este día como si fuera el último” y que si es el último o no, tú vive y disfruta de este regalo que Dios nos dio, la vida”.

por Samara Del Toro 

No hay comentarios:

Publicar un comentario