MEXICO (ANSA) - La activista por los derechos humanos, Marisela Ortiz, abandonó la norteña Ciudad Juárez, la más violenta del país, después de que desconocidos colocaran un cartel frente a una escuela en la que la amenazaron de muerte.
"Efectivamente, la maestra Marisela Ortiz, dirigente de la organización feminista 'Nuestras Hijas de Regreso a Casa', dejó Ciudad Juárez y posiblemente el país", indicó Víctor Quintana, compañero de lucha de la mujer.
Quintana exigió a las autoridades toda la protección posible para Marisela Ortiz, que libró una lucha larga a favor del esclarecimiento de crímenes contra mujeres en Juárez y protestó protestado por los asesinatos recientes de activistas.
A principios de esta semana, un cartel fue colocado en la verja de la secundaria pública del barrio Juárez Nuevo, donde enseñaba la activista. En el cartel, un capo de la organización criminal "La Línea", que firmó como "El JL", la amenazó junto con otra compañera de lucha, Malú García, cuya casa fue incendiada hace unos días, por lo que también salió de Ciudad Juárez.
Otras activistas ya han huido a la capital mexicana o Estados Unidos, ante el temor de sufrir la suerte de su colega Josefina Reyes, asesinada en enero de 2010.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos urgió al gobierno de México a que tome medidas para proteger a los defensores de derechos humanos.
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