Por: Erandi Márquez
En 1950 se instituyó el 19 de febrero como día del Ejército Nacional, aunque el Colegio Militar se fundó en 1823 y este último estuvo cerrado durante 184 años para las mujeres.
Aunque se ve como un gran avance los logros que se han tenido a la fecha en el Ejército Mexicano para las Mujeres, aún tiene un alto costo el poder desarrollarse en este ámbito.
Miles de mujeres en la lucha
Ha habido miles de mujeres que por años quisieron pertenecer a las filas del ejército, pero nunca se les dio la oportunidad, aunque muchas lucharon y se aferraban a sus sueños.
Si nos remontamos a la historia la primera mujer en el servicio activo del ejército y fuerza aérea mexicana fue María González de Carter en 1934, pero fue como afanadora de primera en intendencia; un año más tarde se da el espacio a otra más, pero como enfermera ayudante en el departamento de sanidad militar.
En 1938 como oficinistas
Es en 1938 cuando se da el decreto presidencial crear el cuerpo de oficinistas del ejército, y aunque para aquellos años era un gran avance, observamos que las mujeres solo eran vistas para hacer trabajos administrativos y de ayuda en ciertos quehaceres.
Es hasta 1945 cuando causa alta en la Dirección de Aeronáutica Militar la primera mujer como Sargento Segundo de Mecanógrafa y en 1947 se da la oportunidad cuando se permite como cabo dibujante en el Servicio Geográfico del Ejército.
La brecha histórica
Según informe de la propia SEDENA es 1954 ingresan mujeres al Servicio de Cartografía como Fotogrametrístas, pero es hasta 1991 como ingenieras del servicio cartográfico, ¿Cuántos años pasaron y de qué dimensión es la brecha?.
El caso de la mayor Estela Gracia García es digno de recordarse, ya que esta era hermana del fundador de la Escuela Médico Militar, que quería ser teniente coronel en 1971, en el sexenio de Luis Echeverría. Ella concursó y aprobó con calificaciones de excelencia, pero el entonces Secretario de la Defensa, Hermenegildo Cuenca Díaz, le negó la promoción.
“Para que aprenda a no reclamar”
Aguerrida, peleó su derecho a ascender y como respuesta la detuvieron y encarcelaron tres días en el Campo Militar Número 1. El motivo: “Para que aprenda a no reclamar”. Obtuvo el grado de teniente coronel hasta 1979, en el sexenio de José López Portillo, pero por retiro.
Es el año 1982 cuando la Dirección General de Fábricas de Vestuario y Equipo, entran las mujeres como operarias, encargadas de fabricar y confeccionar el vestuario y equipo que emplea el Ejército y Fuerza Aérea Mexicana, que aunque esto para algunas/os puede parecer un logro, el dar el espacio o la oportunidad, más bien parece acomodarlas en áreas de servicios domésticos.
En el coro en 1985
En 1985 ingresan mujeres para formar parte del coro y orquesta del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, quienes pertenecían a diferentes dependencias, ya que años atrás ni siquiera tenían cavidad en el área cultural y seguramente se creyó dar el espacio a las mujeres era mínimo.
En el mismo año, se integró el agrupamiento femenino, con el fin de que las mujeres de las dependencias de la Secretaría de la Defensa Nacional participarán en el Desfile Militar.
Hasta 2000 en el servicio militar
En 1990 ingresan mujeres a la Dirección General de Fábricas para realizar actividades administrativas y en la fabricación de armamento y municiones, asimismo 10 años después en el 2000 es la primera ocasión que las mujeres realizaron el servicio militar nacional de manera voluntaria, además se crea el batallón de tropas de adiestramiento femenino.
Las principales formas de participación activa por así decirlo fueron en las áreas de Enfermería, Odontología y Administración, siendo hasta 2007 cuando se abrió para las mujeres en las carreras de Infantería, Artillería, Caballería Axial, como piloto aviador e Ingeniería Militar.
Pero no fue sino hasta el año 2008 cuando se difundió la noticia, de que la carrera de las armas en el ejército, se abría al sexo femenino, apenas 14 mujeres entraron por primera vez a la carrera de las armas, lo que fue considerado como un parteaguas en el ejército.
Hace dos años
La Cámara de Diputados aprueba en septiembre de 2011 la Minuta del Senado para que las mujeres pudieran ser nombradas generales del Ejército Mexicano, y en que estén en igualdad de condiciones que los hombres para acceder a todos los niveles de mando supremo, alto, superiores y de unidades en el Ejército y la Fuerza Aérea Mexicanos.
De igual forma, quedó abierta la puerta para que las mujeres ingresen sin distinción alguna a los centros de educación militar, y que tengan los mismos derechos y obligaciones que los hombres dentro de la escala jerárquica militar.
En el 2012 se tenía la estadística que 12 mil mujeres formaban parte del cuerpo de las fuerzas armadas, pero aún ciertas restricciones, pues hay quienes afirman que si tienen hijos no pueden ingresar. ¿Habrá igualdad?
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