Por: Vicky Castillo
La mujer de hoy, ya no se suma a la lista de desfiles de moda, las compras del verano de ropa de marca o las salidas de fin de semana con sus amigas y amigos. En la actualidad las damas juegan un papel fundamental en las actividades que antes creíamos que solo el hombre podía hacer.
Pasan a dejar de sostener el sartén por el mango, a pilotear un avión o sostener un arma. Esta es la realidad actual de muchas mujeres que pueden integrarse a las filas del Ejercito Militar, Escuela Médico Militar, Escuela Militar de Odontología, Escuela Militar de Enfermeras, la Fuerza Aérea, la Marina y la Armada en México. Las mujeres tienen la posibilidad de estudiar en 17 de los 39 planteles educativos militares. Cabe mencionar que de los casi 243 mil elementos que conforman dichos planteles, poco más del 36 por ciento está integrado por mujeres.
Para las ellas no ha sido fácil pertenecer al Ejército. El acceso de las mujeres a las Fuerzas Armadas Mexicanas se remonta al año 1938, cuando se crea la Escuela Militar de Enfermeras. Ha sido una victoria que por años se había esperado, la igualdad de género, en actividades que en épocas anteriores la sociedad no veía de buena manera para que las realizara una mujer.
A diferencia de otros países como Estados Unidos, donde las mujeres representan el 14.4 por ciento del total de elementos (alrededor de 216 mil integrantes), o España, donde representan el 13.5 por ciento (16 mil 311), en México son alrededor del 3.5 por ciento (6 mil 358), según estadísticas. Estas cifras parecen alarmantes ya que en pleno siglo XXI aun observamos la discriminación y no se respeta la igualdad de género.
En el año 2000, los mexicanos vieron uno de los cambios más simbólicos que se ha dado en la última década, esta fue la convocatoria oficial por parte del gobierno federal, para que las mujeres mayores de 18 años que así lo quisieran, pudieran presentar el Servicio Militar Nacional. A raíz de esto, en ese mismo año, la respuesta fue asombrosa, se registraron 134 mil 287 aspirantes en el sistema del Servicio Militar a nivel nacional. De estos jóvenes 19 mil 937 fueron mujeres, es decir, el 14.85 por ciento.
¿Qué interesante verdad? Por esta, y muchas razones, es importante que entendamos y observemos que los tiempos son diferentes. Si queremos un México mejor, necesitamos educar a nuestras hijas e hijos desde el hogar, la base de los buenos valores. Para que en el futuro tengamos personas de bien, con la capacidad de respetar y aceptar que todos somos iguales y debemos de ser tratados por igual.
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